¡Únete a nosotros en la misión de servir a la Iglesia hispana! Haz una donación hoy.

×

En la primera sección de su libro, C. S. Lewis nos lleva de la mano a reconocer dos verdades: Dios existe y estamos enemistados con Él.

Empezamos reconociendo que los seres humanos llevan escrita una ley moral en su interior. Es una “ley de la naturaleza humana” que, a diferencia de las otras leyes (como la de la gravedad), podemos romper cuando queramos.

“Los hombres se encuentran bajo una ley moral que ellos no hicieron, que no pueden olvidar incluso si lo intentan y que saben que deben obedecer” (p. 41).

Esta ley es algo que va mucho más allá de nuestros instintos. Nos dice lo que está bien y lo que está mal a pesar de nuestras pasiones y deseos. No es una ley que haya sido impuesta por nuestra sociedad; la vemos establecida en los corazones de humanos de toda clase de épocas y culturas.

No nos gusta admitirlo. Preferimos decir que “la verdad es relativa”, al mismo tiempo en que nos quejamos de que “eso no es justo”. Se nos escapa la contradicción entre lo que decimos para calmar nuestra conciencia y la manera en que esperamos que el mundo funcione.

Vemos a nuestro alrededor y nos damos cuenta de que las cosas no andan bien, nada bien. No hemos andado conforme a la ley, y hemos sufrido las consecuencias. Si queremos progresar, nos advierte Lewis, tendremos que volver al punto en donde las cosas salieron mal. Tenemos que regresar y dejar de avanzar por el camino equivocado.

La ley y el Legislador

Si hay ley, hay un legislador. Y si hay un Legislador, probablemente vamos a meternos en problemas con Él.

“El cristianismo le dice a la gente que se arrepienta y les promete perdón. Por lo tanto no tiene, que yo sepa, nada que decir a aquellos que no saben que han hecho algo por lo que deban arrepentirse y que no piensen que necesitan perdón” (p. 48).

Jesús lo dijo así: “Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los que están enfermos” (Lucas 5:31). Si queremos empezar a entender de qué se trata el “mero cristianismo”, necesitamos reconocer nuestra condición y saber que hay Alguien a quien tendremos que rendir cuentas por ella.


Acompáñanos en nuestra lectura de “Mero cristianismo” de C. S. Lewis. ¿No sabes qué es #CoaliciónLee? Ve aquí. ¿Quieres participar? ¡Únete aquí!
Recibe cada día los artículos, podcasts, y vídeos más recientes.
CARGAR MÁS
Cargando