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En mi publicación anterior escribí sobre las características de los bravucones en la iglesia. Pero ahora paso de describir a prescribir: ¿cómo lidiamos con los bravucones en la iglesia? ¿Qué podemos hacer para evitar tal intimidación? Aquí nueve de mis sugerencias:

‪1. Combate a los bravucones con el poder de la oración. Los objetivos más comunes de los bravucones son el pastor y el personal de la iglesia. Animo a todos aquellos que están dedicados al ministerio a pedir humildemente a las personas que oren por ustedes todos los días. En dos de las iglesias donde he servido como pastor, he tenido tantas como 100 o más personas comprometidas a orar por mí todos los días. Por lo general, ellos oran por mí por solo dos o tres minutos cada día, al mediodía. Sus oraciones de intercesión para mí fueron breves, ¡pero fueron de gran alcance!

‪2. Trata de tener un grupo de Hechos 6 en la iglesia. Me refiero específicamente a la manera en que la iglesia de Jerusalén trató con la murmuración y la queja. Ellos designaron a un grupo para cuidar de las viudas que eran desatendidas en la distribución diaria de los alimentos. Los siete que fueron designados para la tarea no solo estaban ahí para hacer el ministerio, sino también para preservar la unidad de la iglesia. Las iglesias necesitan, ya sea de manera formal o informal, grupos que vean cómo su ministerio hace frente a los conflictos, quejas y disensiones, para que se preserve la unidad.

‪3. Tener una iglesia con altas expectativas. Muchas veces he abordado el tema de iglesias con altas expectativas e iglesias con bajas expectativas. Iglesias con altas expectativas tienden a ser más unificadas, más enfocadas a la Gran Comisión, más definidas bíblicamente y más orientadas al servicio. En pocas palabras, las iglesias con altas expectativas no ofrecen un entorno propicio a la intimidación y los bravucones.

‪4. Anima a los miembros a hablar y hacer frente a los bravucones de iglesia. La intimidación se desarrolla en una iglesia donde la mayoría permanece en silencio por temor a los bravucones. Los bravucones tienden a dar marcha atrás cuando personas fuertes dentro de la iglesia los confrontan. Necesitamos personas más fuertes en la iglesia.

‪5. Asegúrate de que la política de la iglesia no se convierta en un instrumento útil para los bravucones de iglesia. Muchas iglesias tienen estructuras y líneas de rendición de cuentas ambiguas. La política es débil y mal definida. Los bravucones se aprovechan de la ambigüedad e interpretan las cosas de acuerdo a sus necesidades nefastas.

‪6. Debes estar dispuesto a ejercer la disciplina eclesiástica. La disciplina de la iglesia es una necesidad olvidada en muchas iglesias. Los bravucones necesitan saber que hay consecuencias para sus acciones, y la disciplina puede ser una de ellas.

‪7. Es necesario tener un proceso saludable de poner a las personas mejor calificadas en posiciones de liderazgo en la iglesia.  Los bravucones suelen ser capaces de echar a un lado a las personas menos calificadas que se han encontrado en posiciones de liderazgo. Debe haber un proceso espiritual y diseñado estratégicamente para elegir y contratar a personas para puestos claves de liderazgo.

‪8. Se debe tener un proceso saludable para contratar al personal de la iglesia. Por ejemplo, un error atroz sería la contratación por parte de la iglesia de un miembro importante del equipo sin el apoyo entusiasta del pastor. Si el pastor y el nuevo miembro del personal no tienen buena química, un bravucón puede enfrentar rápidamente el uno contra el otro. Un personal de iglesia unificado es un gran obstáculo para un bravucón de iglesia.

‪9. Fomenta un ambiente de celebración en la iglesia. Iglesias alegres disuaden a los bravucones. A ellos les gustan las iglesias sombrías y divididas.

‪La intimidación en la iglesia es más extendida de lo que a menudo nos gusta admitir. Espero que estas nueve sugerencias pueden ayudar a mantener a los bravucones fuera de tu iglesia.

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Publicado originalmente en Thom Rainer. Traducido por Manuel García.
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