El pasado 23 de junio, en un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, una mayoría (52%) de ciudadanos británicos votó a favor de salir de la Unión. Solo un par de horas después de darse a conocer el resultado del referéndum, el primer ministro británico, David Cameron, anunció su decisión de dimitir de su cargo al frente del gobierno conservador del país. Siendo pastor en España, pero habiendo nacido en el Reino Unido, quiero ofrecer diez cosas que debes saber sobre esta noticia:
- El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte está compuesto por cuatro regiones principales: Inglaterra, Escocia, Gales (o el país de Gales) e Irlanda del Norte. (Esto excluye a la República de Irlanda, siendo esta un país independiente del Reino Unido desde 1922). A pesar del uso común de “Inglaterra” y de “los ingleses”, como si de un país se tratase, Inglaterra no es un país como tal, sino parte de un país.
- La Comunidad Económica Europea (CEE, hoy conocida como la Unión Europea) fue fundada en 1957. El Reino Unido llegó a ser miembro en 1973. En 1975 hubo un primer referéndum sobre el futuro del Reino Unido en la CEE, en el cual una clara mayoría (67%) votó a favor de que el Reino Unido permaneciese en la CEE.
- En años más recientes ha habido una creciente demanda popular a favor de otro referéndum al respecto. Durante las últimas campanas electorales generales en el país (2015), el líder del partido conservador y actual primer ministro del Reino Unido, David Cameron, prometió un referéndum sobre el futuro del país en (o fuera de) la Unión Europea, y esa promesa electoral se cumplió el pasado 23 de junio.
- El término Brexit, acuñado durante la campaña del referéndum, viene de la conjunción de las palabras “Britain” (Bretaña) y “exit” (salida), refiriéndose a la (entonces posible, ahora pendiente) salida del Reino Unido de la Unión Europea.
- Unas pocas semanas antes de la votación parecía que iba ganando la campaña a favor de la salida de la Unión Europea. Luego, el pasado 16 de junio, justo una semana antes del referéndum, Jo Cox, diputada laborista partidaria de la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, fue atacada y asesinada por Thomas Mair. Aunque todavía no ha quedado del todo clara la motivación de Mair, el asesinato de la Sra. Cox, además de afectar muchísimo al público británico, pareció haber tenido un efecto sobre la intención de voto a favor de la permanencia del país en la Unión Europea.
- A pesar de que la mayoría de los principales partidos políticos británicos apoyó la campaña a favor de la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, siendo el partido conservador la gran excepción (encontrándose dividido sobre el tema), al final, la votación no tuvo nada que ver ni con partidos políticos ni con ideologías políticas como tales.
- Los motivos que han llevado a este resultado han sido varios, entre los cuales se encuentran: (1) un sentimiento generalizado de una creciente pérdida de identidad nacional y de soberanía nacional; (2) la percepción de una falta de control en temas de inmigración, acoplada a un doble temor de un aumento del desempleo y de un mayor riesgo de atentados terroristas; (3) impaciencia con la burocracia de la Unión Europea: el costo de su manutención, su baja eficacia y su interferencia en los asuntos internos de los países miembros; y (4) una convicción de que el Reino Unido estaría mejor económicamente fuera de la Unión Europea.
- Las repercusiones del referéndum tardarán en hacerse efectivas. Hoy por hoy, el Reino Unido sigue perteneciendo a la Unión Europea y David Cameron sigue siendo el líder del partido conservador británico y el primer ministro del país. Aunque se empiezan a oír voces desde el otro lado del Canal de la Mancha —“Si se van, que se vayan cuanto antes”— al parecer nadie sabe cuánto tiempo se necesita para que un país miembro salga de la Unión Europea. Tanto al Reino Unido como a la Unión Europea les espera una transición imprevisible, difícil y probablemente desagradable.
- Hay más de tres cuartos de millón de residentes británicos viviendo en España, y yo soy uno de ellos. ¿Cómo afectará la salida del Reino Unido de la Unión Europea a los británicos en España, a España en sí y a la causa del evangelio en España? En este momento hay más temores y rumores que información fiable. Es probable que se compliquen los procedimientos burocráticos, que se reduzcan o incluso se pierdan ciertos privilegios hasta ahora disfrutados —como tal vez lo sea en el área de la asistencia sanitaria— y que una parte de los británicos residentes en España se vea obligada a volver al Reino Unido. Es difícil prever si se verá afectada la industria del turismo en España que tanto depende de las visitas británicas (entre otras). En las zonas más turísticas y en las grandes ciudades hay bastantes iglesias evangélicas de habla inglesa o bilingües que también podrían verse afectadas por la nueva situación.
- Los creyentes británicos han estado divididos sobre este tema y se han oído argumentos más o menos razonables en ambas direcciones. Yo me quedo con tres reflexiones muy sencillas:
- Para los que somos creyentes, el factor decisivo en todas nuestras opiniones y decisiones debería ser la causa del evangelio y no otras consideraciones, por muy legítimas que estas puedan ser;
- El resultado de este referéndum, sea que nos haya alegrado o entristecido, debería llevarnos a todos a intensificar nuestras oraciones por el Reino Unido; y
- El Dios soberano ha permitido este resultado y, haya sido bueno o malo desde nuestra perspectiva humana y muy limitada, sabemos que todo lo que ocurre está bajo el control del Señor, y que tanto lo bueno como lo malo, al final, servirán los buenos propósitos del Rey de reyes.
